Por Marcos Menéndez, Santiago Piano y Santiago Ramos
-¿Te sentís a gusto con tu trabajo?
- Sí, cómo no, muy a gusto.
-¿Siempre te dedicaste a lo mismo?
- Sí, nunca dejé de ejercer esta profesión desde que me recibí hasta ahora, pero sí en algunas otras ocasiones simultáneamente estuve haciendo otros trabajos. En la docencia, siendo directa o indirecta, siempre estuve metido, y las otras actividades tenían que ver con la parte del dibujo: dibujar para imprentas, cosas para telones de teatro, siempre estuvo relacionado con la parte artística.
-¿Hace cuánto tiempo que sos director del Mariano?
-Fue en el año 1999 que empecé en la dirección de segundo ciclo; luego que se jubiló la directora de primer ciclo fue cuando empecé con la dirección de los dos ciclos. Yo entré por un profesor que se llama José Luis Cobelo que era el director anterior.
-¿Es un trabajo muy estresante?
- Bueno, tiene momentos, tiene momentos que sí y otros momentos más tranquilos, hay instancias en que puede haber complicaciones y puede llegar a generar estrés.
-¿Cómo es tu relación con los funcionarios?
- De mi lado creo que es excelente, por lo menos siento eso; estaría bueno comprobarlo del otro lado, creo sentirme a gusto y no quiere decir que siempre esté todo bien, pero hay cosas que por mi cargo tengo que marcar y no crea molestias, pero sí algunas fricciones que hablándolas de buena manera, con argumentos, se puede llegar a una visión más objetiva.
- ¿Estudiaste en este mismo liceo?
-No, yo hice el liceo en la ciudad de Paysandú y vine acá a hacer el IPA, nací en Paysandú y viví allí hasta los 18 años; después me mudé para Montevideo, estuve solo y terminé la carrera en el IPA y siguió mi vida acá en la capital.
- ¿Qué querías ser de pequeño?
- Cuando era muy pequeño uno siempre dice "quiero ser astronauta o bombero", pero después de no tan pequeño encaminé a una parte más de dibujante, en algún momento pensé en la Facultad de Arquitectura y también cursé unos años de Ingeniería, después que terminé el IPA hice 1 año de ingeniero agrimensor porque la agrimensura junta dos cosas que me gustan: la matemática y el dibujo.
- ¿Cómo te definirías a vos mismo?
- Cuando me pongo en un proyecto que me gusta, quizás le dedico toda la atención a ese proyecto y llego a ser demasiado obsesivo, y creo que se necesita creatividad para hacer cualquier tarea; la creatividad me parece interesante aplicarla en cualquier cosa que uno pueda hacer, ya sea científica o artística, porque la creatividad en la parte científica también es importante, y si uno practica la creatividad, hace un trabajo con seriedad pero también disfruta; si uno hace un trabajo muy reiterativo y que no es creativo uno empieza a parecerse a una máquina.
Hay que dar lugar y espacio a resolver las cosas de diferentes maneras, en una institución hay estructuras previstas para resolver determinado tipo de problemas, pero la realidad a veces va más allá de la previsión, entonces a veces se presentan problemas nuevos que las instituciones a veces no tienen los recursos y los protocolos para resolver y ahí es el momento clave donde se necesita la creatividad: qué hacemos ahora frente a esto nuevo, cómo se soluciona, y es así cómo se avanza; sino quedamos estancados y ahí depende de la gestión de uno, que no depende de una persona: la gestión del liceo depende de una organización y que cada uno de las partes haga lo que sabe hacer, lo que se le contrató para hacer .
De nuestra parte agradecemos al director Carlos Spalvier por la entrevista realizada y por tomarse su tiempo para charlar con nosotros.
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